miércoles, 7 de abril de 2010
La mirada de Yuyu
Hay miradas que asustan, que piden, que exploran, que esperan, que se pierden, que encuentran, que nunca saben, que anhelan, que agradecen, que ríen, que parecen llorar, que lloran. La de Yuyu hace todo eso a la vez, mientras se clava, mientras se concentra en un gesto de un niño mayor al de su edad (dos años), mientras da un paseo por el mundo para volver al cabo de un rato. Yuyu tiene claro qué mano le puede ofrecer comida y también la que le puede asir y subirlo a caballito, que desde ahí como que el mar se ve mucho mejor.
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Quina mirada, tens raó. És intensa i poc pueril.
ResponderEliminarI la mà és blanca...
Mar